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Tu futuro es un juego de apuestas y estrategias, no de reglas.

En el marco de una oleada de dudas existenciales y vocacionales me encontré con este video:

Está de más decir que el video no es mío.

¿No te pasa que tienes demasiados sueños que parecen inabarcables todos en una sola vida? Quieres sacar tu carrera, especializarte afuera (nadie sabe con qué plata, pero algo se te ocurrirá), darte un tiempo para recorrer el mundo, ejercer mientras empiezas a formar una familia y todo considerando que en algún minuto se supone que tendrás tiempo para las cosas que aplazas hoydía porque mientras estudias el tiempo no sobra…

Bueno ¿y por qué no?

Al igual que la mayoría de mi generación, me encantaría congelar un semestre o un año y salir a mochilear y recorrer lo que más pueda. ¿Y por qué no? Se supone que se vive una vez, ¿Para qué desperdiciarla en estar aplazando constantemente lo que uno quiere para ese momento en el que se supone que podremos pagarlo? Lo más probable es que cuando podamos pagarlo, no tengamos tiempo; y cuando tengamos tiempo y algo de dinero, no tendremos energía.

Cuesta pensar que vivimos los mejores años de nuestra vida si todavía no vivimos el resto de nuestra vida como para darnos cuenta, pero dicen por ahí que así es.
A veces hasta siento que tenemos una presión social de vivir la vida al máximo porque nos pasan diciendo que nunca más seremos tan felices, pero al mismo tiempo nos llenan de prohibiciones para que «tengamos un futuro al que apuntar».

En realidad muchas de las prohibiciones tienen un fondo puramente monetario. Para los que viven más acomodados, se excusan tras la premisa de que no hay plata para viajar o para dedicarse a lo que quieren, y por supuesto que no puedes esperar a que te lo paguen. Hay muchas formas de ganar dinero y hay que tener la paciencia de ahorrar; muchas veces no es necesaria una millonada, sino una base con la que dar el primer paso.

Quizás sea un poco idealista después de ver un video inspiracional como ése, pero pienso que el futuro seguirá ahí para cuando hayamos terminado de hacer las cosas con las que soñamos. Nadie sueña (o bueno, no pondré las manos al fuego por esto) en pasar su vida durmiendo sin hacer nada, todos tienen aspiraciones, todos tienen metas. ¿Y si enmarcamos el futuro en esas metas más allá de las que nos impone el camino acostumbrado?

Crecemos y el techo que una vez nos pareció tan alto, está cada vez más cerca.

Es muy probable que estas palabras no le importen al 80% de los que lo lean, pero si logro inspirar a alguien a que siga sus sueños, habré triunfado de alguna manera.

Love the life you live
Live the life you love

-Bob Marley

Abre los ojos

Estoy viva porque me doy cuenta
de que estoy muerta.

¿Te ha pasado que vas en la micro, en el metro o caminando por la calle y todos te parecen muertos?
Autómatas, casi máquinas que siguen una rutina a la perfección y ya sin emoción: no es tristeza, no es enojo; es profunda apatía por lo que pase afuera, a su al rededor o dentro de ellos.

Probablemente, desde afuera, para ellos tú también estás muerto.

Date cuenta de tu muerte para darte cuenta de que estás vivo: de que vives y que cada día sin emociones, es un día que ya fue. Se perdió y no va a volver.

Es muy difícil llevarlo a cabo, pero no hay que dejarlo pasar.
Es importante abrir los ojos de vez en cuando.

Life is a story told by an idiot

She would have died later anyway.
That news was bound to come someday.
Tomorrow, and tomorrow, and tomorrow.
The days creep slowly along until the end of time.
And every day that’s already happened has taken fools that much closer to their deaths.
Out, out, brief candle.
Life is nothing more than an illusion.
It’s like a poor actor who struts and worries for his hour on the stage
and then is never heard from again.
Life is a story told by an idiot,
full of noise and emotional disturbance but devoid of meaning.

«La vida es un idioma extranjero. Todos los hombres la pronuncian mal» – Christopher Morley

Reglas de Vida según Bill Gates

Regla Uno– La vida no es justa, acostúmbrate.

Regla Dos– Al mundo no le importará tu autoestima. El mundo esperará que logres algo, independiente de que te sientas bien o no contigo mismo.

Regla Tres– No ganarás US $5.000 mensuales justo después de haber salido de la universidad y no serás un vicepresidente hasta que con tu esfuerzo te hayas ganado ambos logros.

Regla Cuatro– Si piensas que tu profesor es duro, espera a que tengas un jefe. Ese sí que no tendrá vocación de enseñanza ni la paciencia requerida.

Regla Cinco– Dedicarse a voltear hamburguesas no te quita dignidad. Tus abuelos tenían una palabra diferente para describirlo: le llamaban oportunidad.

Regla Seis– Si metes la pata, no es culpa de tus padres, así que no les lloriquees por tus errores; aprende de ellos.

Regla Siete– Antes de que nacieras, tus padres no eran tan aburridos como son ahora. Ellos empezaron a serlo por pagar tus cuentas, limpiar tu ropa y escucharte hablar acerca de la nueva onda en la que estabas. Así que antes  de emprender tu lucha por las selvas vírgenes contaminadas por la generación de tus padres, inicia el camino limpiando las cosas de tu propia vida, empezando por tu habitación.

Regla Ocho– En la escuela puede haberse eliminado la diferencia entre ganadores y perdedores, pero en la vida real no. En algunas escuelas ya no se pierden años y te dan las oportunidades que necesites para encontrar la respuesta correcta en tus exámenes y para que tus tareas sean cada vez más fáciles. Eso no tiene ninguna semejanza con la vida real.

Regla Nueve– La vida no se divide en semestres. No tendrás vacaciones de verano largas en lugares lejanos y muy pocos jefes se interesarán en ayudarte a que te encuentres a ti mismo. Todo esto tendrás que hacerlo en tu tiempo libre.

Regla Diez– La televisión no es la vida diaria. En la vida cotidiana, la gente de verdad tiene que salir del café de la película para irse a trabajar.

Regla Once– Sé amable con los «NERDS» . Existen muchas probabilidades de que termines trabajando para uno de ellos.

¡Ayuda!

Ya no sé qué cresta hacía antes de tener Messenger, Fotolog, Facebook, Twitter y por supuesto, un Blog. Hay días que al terminar me meto en la cama y siento que en realidad los perdí frente al PC, pero cuando veo la pantalla apagada me desespero: «¿Y si alguien me está esperando?» «¿Y si me están buscando?» «¿Qué estará pasando en Twitter? ¿Y con mis amigos en Facebook?» Y para qué hablar de la angustia cuando ya pasó más de una semana y no he subido nada nuevo al Blog.

Por eso necesito una campaña, algo que me aleje de este aparato. ¿No nos haría bien a todos? A ver si nos salvamos del mal que nuestros padres nos advirtieron tanto: quedaremos todos con los ojos cuadrados.

Así que llamo al público que me diga ¿que cresta hacíamos para vivir tan bien antes de que Internet fuese toda nuestra vida?

Protegido: Mi mente dada vuelta y mis lágrimas de pena por llegar

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Live to Write… To live

[…] la memoria es frágil y el transcurso de una vida es muy breve y sucede todo tan deprisa, que no alcanzamos a ver la relación entre los acontecimientos, no podemos medir la consecuencia de los actos, creemos en la ficción del tiempo, en el presente, el pasado y el futuro, pero puede ser también que todo ocurre simultáneamente…

*

Este fragmento es de La casa de los espíritus de Isabel Allende. Aquí, ya en el final de la historia, Alba se explica a sí misma por qué Clara (su abuela) escribió tantos diarios de vida. La mujer escribió a lo largo de 50 años todo lo que le pasaba y antes de morir los ordenó todos por acontecimientos, en vez de por orden cronológico.

Una vez una amiga me dijo que ella escribía su vida en cuadernos porque, como es sabido, es recomendable meditar 10 minutos al día (No voy a entrar en detalles sobre qué es lo que hay que meditar, porque es simplemente eso, pensar un poco más allá de las cosas que se ven ya sea sobre ti, los que te pasa, lo que no te pasa, etc) y ella escribe lo que va pasando en su vida, lo que piensa, lo que siente y esa es su forma de meditación. Me dijo que cuando termina un ciclo en su vida usaba un nuevo cuaderno, ya que es como empezar de nuevo. Y así es como ella recuerda cosas y ve al pasado las cosas tal cual fueron (o tal cual las sintió) notando su evolución y crecimiento a lo largo del tiempo.

No pretendo decirle al mundo que corran a comprar cuadernos y diarios de vida, porque no es algo para todos. Yo no tengo la constancia como para escribir periódicamente lo que me va pasando (tampoco puedo seguir telenovelas ni entrenar un deporte periódicamente ni usar un reloj sin perderlo), pero sí tengo muchos cuadernos y cuando algo me inspira lo dibujo o lo escribo ya sea un poema, una canción, lo que siento o pienso, quizás lo que soñé o lo que sea. EL PUNTO ES, que la vida es muy corta y la mente muy frágil. Podemos acordarnos de lo que pasó en algún momento de nuestras vidas perfectamente, pero lo que sentimos o pensamos en ése momento y ésa etapa de nuestras vidas, va a empezar a divagar con el tiempo y no se puede decir que no es verdad.

Por eso lo que sí pretendo decirle al mundo es que deje un rastro, aunque sea sólo a veces cuando pase algo que consideren importante. Ya sea escrito, dibujado, cantado, quizás en una grabadora o en una nueva receta de postre. Quizás así más adelante les servirá para atar cabos sueltos en sus vidas y hasta en las de otras personas.

La Eterna Juventud

El 25 de junio murió uno de los ídolos más grandes de la música, Michael Jackson. A la edad de 50 años, Michael se estaba preparando para volver con una gira mundial que estaba supuesta a empezar este 15 de julio en Inglaterra. Sus espectáculos son reconocidos al rededor del mundo como los mejores shows musicales del mundo y estaba previsto que con esta gira Jackson ganara más de 400 millones de dólares. Además de eso, hay rumores de que el artista tenía planes de sacar un nuevo disco que empezaría a preparar el próximo año.

Sin tomar en cuenta sus millones, su incuestionable talento y su fama mundial, ¿podría ser que este hombre pudiese ser considerado una persona más? Pongo de ejemplo a este artista en este tema por la misma razón por la que nunca hubiese podido ser una persona normal: Michael Jackson le tenía un miedo irremediable a la vejez.

Además de sus incontables cirugías que no dejaban ver una arruga en su cara (o una nariz real), Michael tenía un campo gigante llamado «Neverland» (el país de Nunca Jamás, donde vivía Peter Pan) donde supuestamente estaba lleno de juegos de feria (como mini montañas rusas, autitos chocones, etc) e invitaba a cientos de niños para que pasaran el día con él. Además dormía en una cama con sábanas especiales que eran, según dicen, anti-envejecimiento y su mansión contaba con aire acondicionado con colágeno incluido que se cree, evita las arrugas.

A pesar de todo esto Michael Jackson murió.

La juventud, al igual que la vida no son para siempre y no podemos aparentar que lo son. Hace mucho un amigo me preguntó si es necesario envejecer y enfermar. Él decía que no, que ésas cosas son mentales. Yo le expliqué que sí es necesario; primero porque simplemente es algo que nos va a pasar a todos y segundo porque si fuésemos siempre jóvenes y sanos no lo apreciaríamos, no sabríamos lo que es estar mal.

La proposición de mi amigo (quien de todas formas no me escuchó) podría esconder un poco de ese miedo a crecer,  es infantil. Imagínense lo desagradable que debe ser tener un padre que a los 50 años sigue siendo inmaduro y tiene la mentalidad de un adolescente.

Personalmente creo que la vida es así por algo; debemos crecer, madurar y aprender de nuestros errores. A todos nos llega la hora, tarde o temprano, de nacer, de crecer, de comportarnos como adultos (al menos cuando lo amerite) y finalmente de morir. Si te apuras y vives antes alguna de las etapas de la vida, te estarás perdiendo otra, pero si te quedas pegado en una te perderás muchas.

Los invito a vivir. Todo a su tiempo, pero a vivir y no dejar de vivir ni de avanzar.

Usen bloqueador solar

Éste video me encontró. El año pasado lo mostraron los cuartos medios unos días antes de dejar el colegio, con propósito de dejar en nosotros algo bueno, que nos enseñara de la vida de alguna forma que pudiésemos entenderlo.

El resultado fue este maravilloso video, que como fabor, les pido que lo muestren a la gente que quieran:

Lo he visto unas 7 veces y se me sigue poniendo la carne de gallina cada vez que lo veo. Quizás sea porque ninguno de nosotros vino con algún tipo de manual de instrucciones y probablemente, ésto sea lo más parecido que encontremos.